Receta de Garlone Bardel autor del Yoga CookBook

Soy perfecta para otoño-invierno, esta reconfortante receta gracias al dulzor de la calabaza, aporta una buena cantidad de energía para todos los tejidos.

De hecho, al igual que la calabaza, el zapallo o incluso el calabacín, la calabaza tiene propiedades nutritivas, pero también diuréticas y... sedantes. Adaptado a todos los doshas, ​​cabe destacar que reduce pitta (fuego) pero aumenta kapha (agua) y vata (aire). Es excelente en casos de fatiga, trastornos del sueño, estreñimiento... Las calabazas, alimentos tipo vyana, cuya energía coordina, distribuye y regula los demás pranas por todo el cuerpo, son fortalecedoras y estimulantes. Para un almuerzo completo, acompáñalo de un pequeño bol de arroz o de una buena rebanada de pan de espelta. Y por la noche, el plato solo es muy bueno para una comida ligera y de fácil digestión.

Para 4 personas

En la cocina: 15 min

  • ½ a 1 calabaza (dependiendo del tamaño)
  • 6 cucharadas de anacardos
  • 3 cucharadas de jarabe de arce
  • 6 cucharadas de aceite de oliva
  • jugo de 1 limón
  • la ralladura de 1 limón
  • 1 cucharadita de jengibre fresco rallado
  • 2 cucharadas de cilantro picado
  • 2 cucharadas de perejil picado
  • pimiento triturado (una idea: mezcle diferentes tipos de pimientos en el tanque del molinillo y los sabores serán aún más variados y refinados)

la preparacion

Cortar la calabaza en tiras grandes, ni muy finas ni muy gruesas. Cocínelo en la cesta de vapor de una vaporera durante unos 10 minutos. Utilice la punta de un cuchillo para comprobar que la pulpa de la calabaza esté tierna sin desmoronarse. Mientras se cocina, pica los anacardos en trozos muy gruesos, colócalos en una cacerola con el sirope de arce y dóralos a fuego medio hasta que los anacardos queden cubiertos del almíbar (apenas 2 minutos). Prepara el condimento en un bol pequeño añadiendo el aceite, el jugo de limón y el jengibre finamente rallado. Divida la calabaza cocida caliente en platos, espolvoree con los anacardos cubiertos con jarabe de arce, vierta generosamente sobre la vinagreta de limón y espolvoree con cilantro y perejil picados. Con un rallador microplano o un rallador muy fino, rallar la ralladura de limón en los platos. Agrega una pizca de pimienta triturada y sirve inmediatamente.

Encontrarás todas estas hermosas recetas en el libro Yoga CookBook de Garlone Gardel, Ediciones Ulmer.

Crédito @Thomas Dhellemmes

06 diciembre 2017 — Patricia Nagelmackers